El principio de incertidumbre o de indeterminación y el cumplimiento normativo
Werner Heisenberg, famoso por su Principio y por su Premio Nobel de Física en 1932 (concedido, como en muchos otros casos, por otra cosa), y algo menos famoso por la ambigüedad histórica entre haberse equivocado en los cálculos para la fabricación de una bomba atómica para Hitler y el haber intentado retrasar el proyecto por razones morales, enunció el principio de incertidumbre o de indeterminación en los siguientes términos:
o podemos conocer con igual precisión la posición y la cantidad de movimiento de una partícula:
Δχ . Δpχ =h/4π
siendo:
h=6,626·10-34 J.s (constante de Planck)
Pχ= m dx/dt
Cumplimiento e indeterminación
Nos viene a decir que no podemos saberlo todo de algo. Se ha entendido este principio, erróneamente, como una limitación a la física clásica determinista, es decir, la que puede predecir trayectorias y velocidades. A veces también se ha dicho que la incertidumbre proviene de la interferencia con los medios de medición, que distorsionan lo medido…hoy sabemos que el principal problema que hay que enfrentar al pretender predecir comportamientos de partículas es que no son partículas, sino que se comportan como ondas. El propio Heisenberg trabajó con la mecánica cuántica matricial, en la que sólo importaban los estados inicial y final, pero no los comportamientos intermedios.
Aunque a estas alturas de discurso imagino que el lector ya habrá deducido la relación del Principio enunciado con el Cumplimiento, quizás sea oportuno hablar de otro principio, normalmente aplicable a empresas en fuerte expansión, que se podría enunciar:
¿En qué momento se nos fue todo de las manos?
Es el Cumplimiento quien puede dar luz a esta etapa intermedia entre el éxito y el despiste, quien puede ahondar en esa etapa ondulatoria, irregular, en esa doble existencia que llevan las empresas, la que hay en la cabeza del Jefe y la realidad, hasta que un día aparece alguien, a veces nosotros mismos, y nos decimos, ¿y ahora qué hacemos?
Control de procesos
El Cumplimiento parece estar sujeto al Principio de Incertidumbre porque la precisión en el control de los procesos no parece compatible con el de las personas, y al revés. Hay muchas empresas obsesionadas por la literatura procedimental que no son capaces de orientar o convencer a la plantilla, y otras que confían ciegamente en su personal, los de la mano permanentemente chamuscada. Pero es difícil encontrar el equilibrio entre ambas actitudes.
No obstante, una elemental aplicación de la lógica matricial nos dirá que una plantilla y unos colaboradores entrenados en la cultura ética dará, como resultado, una permanencia de la empresa en el tiempo. Aunque no sepamos o no podamos saber cómo se hacen las cosas por en medio…pocas reglas pero que se cumplan. Que lástima, con lo bien que podríamos vivir los consultores con nuestros “paquetes” de políticas. Se comprende que a Heisenberg le dieran el Nobel por otra cosa.