Me sorprenden las escasas referencias que existen en las redes, en los informes de las empresas y en general el poco ánimo que veo en comentar un asunto que considero muy relevante cuando hablamos de cultura de cumplimiento:
¿Cuánto gastamos en Compliance?
¿Cuánto se gastan las empresas españolas, cotizadas, grandes y pequeñas, pymes, universidades, fundaciones, organismos públicos en compliance?
¿Qué parte de su P&L destinan a recursos humanos y tecnológicos, o a apoyo externo para mantener un sistema eficaz de compliance?
¿Es suficiente para confiar en que sus planes y sistemas son “eficaces”?
¿Qué presupuesto es razonable? ¿Quién determina ese presupuesto y cómo lo hace?
Como estamos en el mundo de lo real, algunas referencias ya tenemos los que nos hemos dedicado a esto internamente o como consultores. Sería fácil hacer escarnio sobre la abundancia de expertas consultorías que ofrecen inmejorables servicios de compliance para empresas con presupuestos que son parecidos al coste de la cesta navideña del vigilante jurado de la organización, pero no voy a caer en ello.
Pero…¿ Cuáles son las recomendaciones?
Basta darse una vuelta por nuestra castiza biblia del compliance, la UNE 19601, para observar la cantidad de referencias existentes en la misma sobre este tema. Seguro que se me ha pasado alguna:
El órgano de administración debe (…) dotar al sistema de gestión de compliance penal y en concreto al órgano de compliance penal de los recursos financieros, materiales y humanos adecuados y suficientes para su funcionamiento eficaz (5.1.1. c)
El órgano de compliance (…) debe personificar la posición de máximo garante, por lo que debe disponer de suficientes recursos y contar con personal que tenga las competencias, estatus, autoridad e independencia adecuadas. (5.1.2. c)
La alta dirección (…) debe (…) garantizar la disponibilidad de recursos adecuados y suficientes para la ejecución eficaz del sistema de gestión de compliance. (5.1.3. c)
Al planificar cómo lograr sus objetivos de compliance penal, la organización debe determinar (…) 2) qué recursos se requerirán, debiendo disponer de modelos de gestión de los recursos financieros adecuados para impedir la materialización de los riesgos… (6.3. )
La organización debe determinar y proporcionar los recursos necesarios para la adopción, implementación, mantenimiento y mejora continua del sistema (…) Los recursos incluyen, como mínimo, los financieros, tecnológicos, y humanos, así como el acceso, en su caso, a asesoramiento externo. (7.2)
La organización debe implementar procedimientos que (…) garanticen que se dispone de recursos con capacidad, autonomía e independencia para realizar las investigaciones pertinentes (8.8)
Revisión por la alta dirección. Esta revisión debe considerar (…) g) la adecuación de los recursos asignados al compliance…(9.4.)
Ahí es nada…. Pero… ¿cuál es la realidad?.
¿Qué es adecuado y suficiente?
¿Qué es adecuado y suficiente atendido el contexto de la organización de que se trate? ¿qué son recursos con capacidad? ¿qué son los recursos necesarios?.
Si fuera una discusión con mi mujer, tengo claro lo que son “recursos necesarios”, pero si tengo que discutir con un consejo de administración, con una junta de socios o con un juez instructor, igual ya no lo tengo tan claro. Dejo a mis amigos penalistas, fiscales y magistrados la puerta abierta para que opinen sobre estos conceptos jurídicos “indeterminados”…
Lo cierto y verdadero es que sí: que todo el mundo habla de compliance, todas las empresas cotizadas, reguladas o no, las pymes y las no tan pymes ya conocen el asunto, pero… ¿cuántas personas tienen en su organización dedicadas a tareas de compliance? ¿qué niveles salariales tienen esas personas?; ¿han añadido a sus funciones –por la misma compensación que ya tenían– funciones de cumplimiento?; ¿qué presupuesto anual destinan a compliance?; ¿cuánto es ese presupuesto comparado con el del departamento legal o con las sanciones pagadas a los reguladores?; ¿qué divisiones de la organización contribuyen a ese presupuesto?; ¿qué medios tecnológicos tienen para hacer frente al conocimiento de nuevos riesgos de cumplimiento, al seguimiento de su Plan, a la auditoría de sus controles?; ¿cuánto invierten (perdón, gastan, que ya sabemos que compliance es un centro de coste) en formación en ética o en el conocimiento de las obligaciones y riesgos de cumplimiento?; ¿cuánto gastan en auditoría externa de sus planes?; ¿y en consultoría? (para este última cuestión no necesito respuestas, gracias).
Que levante la mano quien conozca una gran empresa española (si, grande de verdad) que tenga más de 15 personas en su departamento de compliance y gaste más de un millón de euros al año y no sea una institución financiera. Rien ne va plus…
Que alguien haga una encuesta por favor…
Quizás es éste un tema tabú. O es que da mucha vergüenza contar la verdad. Ánimo a nuestras queridas –y ya casi incontables- Asociaciones Profesionales de Compliance a que promuevan algún ejercicio de benchmarking que aporte datos (si es que consiguen una muestra fiable).
Entre los informes existentes –siempre a nivel global- he encontrado un par hechos por Deloitte que recogen algunos datos, pero la muestra de referencia son empresas cotizadas y el dato más relevante en materia de presupuesto (Compliance in motion –Deloitte Risk Services 2015) es que el 40% del mismo se va en salarios, un 16% en formación y solo un 7% en consultoría externa.
Aunque sabemos que España no es US, por si sirve de algo, dejo unas cuantas reflexiones extraídas de una encuesta sobre recursos destinados al compliance publicada en 2016 por la Society of Corporate Compliance and Ethics (SCCE) cuyos datos invito a revisar accediendo al enlace.
En relación con el número de staff dedicado a compliance los datos de la encuesta muestran que en empresas con una facturación total menor de 5M de dólares, el 44.4% de ellas tenía entre 2 y 5 personas dedicadas a compliance. Ese tamaño de equipo es aparentemente el más frecuente incluso en empresas con facturaciones por encima de 100M. Solo encontramos equipos de más de 50 personas (14,8%) en empresas que facturan más de 3.000 millones.
En otras palabras: el 63% de las empresas que facturan menos de 5M tienen entre 1 y 5 personas dedicadas a compliance, mientras que empresas que facturan a partir de 100M, el personal asignado sube hasta 10 personas (70% de las empresas entre 2 y 10).
Si hablamos de ratios por número de empleados, aquellas empresas con menos de 100 empleados (¿nuestras Pymes?) el 83,5% de ellas declaran contar con entre 1 y 5 empleados dedicados a compliance, mientras que si subimos el rango de empleados totales entre 3.000 y 5.000 el 71% de las empresas dice emplear entre 2 y 10 personas en compliance.
Presupuesto para compliance
Si de presupuesto hablamos, tal parece que un 23,5% de empresas con menos de 100 empleados gasta entre 100.000 y 250.000 dólares al año. Mientras que si elevamos el ratio a entre 3.000 y 5.000 empleados, el 50% de las empresas gastan anualmente por encima de un millón de dólares.
Y si de porcentajes de gasto en función de la facturación se trata, parece que el 50% de las empresas que facturan menos de 5M, gastan al año menos de 100.000 dólares y un 20% de ellas algo entre 100.000 y 250.000.
Hay un 28% de empresas que confiesan asignar un millón de dólares o más de presupuesto cuando sus facturaciones están entre 100 y 500 millones de dólares.
En fin… comparemos nuestros propios datos y veamos si lo que nos gastamos en compliance es “adecuado y suficiente” para nuestros objetivos de cumplimiento.
Luis Ávila
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